Esta frase fue de las primeras que oí al llegar a mi servicio el pasado mes de junio tras acabar los cursos iniciales que imparte el hospital. Casi sin tiempo a aterrizar, tocaba ponerse a meter datos para poder hacer los pósters y buscar casos clínicos interesantes para presentarlos. En este caso se trataba del Congreso anual de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), que se celebró el pasado mes de noviembre en Málaga.
Lo primero que te hecha para atrás es el precio de las inscripciones:
Éstos son los precios de las inscripciones del próximo Congreso, que se celebrará en Murcia del 19 al 21 de noviembre |
Esto es de locos. Después de haber ido, no lo vale ni por asomo. Durante los años de representante estudiantil, he podido colaborar con varios Comités Organizadores del Congreso de Educación Médica que organiza el CEEM cada año y puedo decir que se salen estupendos congresos para cientos de estudiantes de Medicina con presupuestos económicos. Obviamente, es a otra escala; pero es que es algo exagerado.
Si había algo que tenía muy claro, es que yo no iba a pagar semejante cantidad de dinero, así que tocaba buscar laboratorio que me lo pagara. No es ningún secreto (ni me avergüenza decir) que la inscripción al Congreso me la pagó Pzifer; el transporte, Daiichi Sankyo, y el alojamiento, Novo Nordisk. Esto no me obliga a nada con ellos, pues son conscientes de que soy R1 y sólo puedo prescribir en las guardias (y básicamente siempre es lo mismo). Ellos hacen su trabajo y yo, el mío (mi relación con los representantes dará para otro post, jeje).
Entonces, ¿qué me traigo yo del Congreso? Lo primero es que a un Congreso no se va a aprender. En éste, tomas referencias para estudiar en casa después. Es cierto que siempre te quedas con alguna cosa; pero para nada esto incluye todo lo que yo considero que es "aprender". Lo que sí aprendes con el Congreso es a crear una base de datos, ha diseñar un póster y a presentarlo, a utilizar el (maldito) SPSS... Para esto sí sirve un Congreso, para dar a conocer el trabajo que realizas durante el año previo, ¡que no es poco!
Durante el mismo, vas a las diferentes charlas que te interesan (nosotros, concretamente, fuimos principalmente a las que participaba uno de nuestros adjuntos) y vas buscando tu póster en las pantallitas para hacerte la foto de rigor con él, además de la sala donde tendrás que presentarlo.
Y, por supuesto, a un Congreso se va a socializar y a conocer la ciudad. En mi caso, era la primera vez que estaba en Málaga, así que tocaba paseo por el centro e ir a la playa a comer unos espetos, además de salir por la noche malagueña.
Después de todo el día en el Congreso, nos lo pasamos pipa en la noche malagueña |
Y para finalizar...
- Puntos positivos de este Congreso:
- Diseñaron una aplicación muy intuitiva y útil.
- Algunas charlas podían verse en streaming.
- La localización. Málaga es una ciudad preciosa.
- Fuimos todos los residentes juntos en una furgoneta, al estilo de la familia que somos :)
- Puntos negativos de este Congreso:
- El precio de las inscripciones. Desorbitado, sin duda alguna.
- La localización del Palacio de Congresos. En medio de una autovía, lejos de todo.
- Muchas charlas solapadas. Hay mucha oferta; pero esto hace que tengas que elegir entre varias que consideras interesantes.
- El espacio para comer era muy pequeño para la gran cantidad de gente que estábamos allí.
¿Un Congreso es útil? Sí. ¿Es la panacea de la formación? No. Y para muestra, la charla sobre Medicina Interna 2.0, que tuvo de 2.0 sólo el nombre. Los congresos necesitan un cambio para que sean amenos y podamos aprovecharlos al 100%. Tarde o temprano, tendrán que adaptarse a los nuevos modelos de formación que demandamos los profesionales de la salud. ¡Todo un reto! A ver qué tal se nos presenta el de Murcia...
P.D.: Si has llegado hasta aquí, enhorabuena en primer lugar. No es fácil terminar de leer este testame... Digo, post. En segundo lugar, éste se engloba dentro del #CarnavalSalud de marzo, aunque sea algo tarde... Y, en tercer lugar, te esperamos el próximo martes, 29 de abril, a las 22:00 horas en el tweetup sobre este tema. Puedes participar con el hastag #cambiacongreso.
A mí, como de ahora en adelante tocará pagar también, lo que me gustaría es saber a qué se dedica ese dinero. Es decir, que me desglosen gastos y yo vea en qué se va el dinero, porque me cuesta creer que un Congreso cueste tantísimo. Y sé de lo que hablo, xD.
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